1.Apostar por lo natural, la cocina biofílica
La biofilia es entender el beneficio que existe en que el hombre conecte e interaccione con la naturaleza, y es una tendencia muy clara en la decoración de cocinas para este 2023. La arquitectura y el diseño se muestra a través de formas orgánicas y materiales naturales, como podrían ser el mármol o la piedra natural, que procedan del entorno natural, dando un claro protagonismo a los colores tierra y neutros y a las plantas, dando, a la vez, al diseño un toque de color. Las maderas poco tratadas cobran protagonismo y los materiales reciclados o de segunda mano y elementos cerámicos dan un aire de naturalidad que es una clara tendencia.
2. Toques de color con predominancia de tonos naturales
Esta tendencia hacia lo natural facilita que los colores en las cocinas sean colores naturales, desde colores tierra o terracota a colores más brillantes como el verde, o el azul, que recuerdan a los colores del mediterráneo e inspiran espacios vitales y optimistas.
Por otra parte, los materiales naturales como maderas y bambú o piedra y mármol siguen esa paleta de tonos naturales, tierra, grises y beige y el negro se convierte en un buen contraste con las fibras naturales, aportando sofisticación y elegancia a las cocinas. Esta tendencia se basa en la mezcla de materiales y colores, pero siempre en combinación con la naturaleza.
3. Espacios amplios, abiertos y flexibles
La cocina se convierte en un espacio amplio, cobrando importancia dentro de la casa y siendo un espacio cada vez más flexible y sostenible, que aboga también por la cultura del bienestar para que el espacio sea cada vez más cómodo y organizado.
Por otra parte, si revisamos la distribución del espacio, hablamos de una distribución esencialmente abierta y conectada con otras estancias, muy especialmente en el caso de los pisos pequeños, que se combina con mobiliario modular y flexible para su comodidad.
4. Tendencia al minimalismo
Finalmente, la última tendencia en decoración de cocinas este 2023 es el minimalismo, simplificando formas, colores y manteriales e utilizando especialmente tonos neutros como el blanco para fomentar la luz natural y líneas sencillas que den calma y tranquilidad.
En esencia, esta tendencia se centra de nuevo en lo natural, con elementos simples y bellos y colores neutros y calmados cercanos a la naturaleza.